Tiene unos colores iridiscentes impresionantes, puede ser de tonos azulados, violetas, verdes, amarillos e incluso naranjas, y es muy apreciada por la belleza que tienen estos brillos de distintos colores.
Es una piedra altamente mística y protectora, desvía fuerzas no deseadas del aura y forma una barrera ante las energías negativas.
La labradorita alinea los cuerpos físico y etérico, estimula la intuición y los dones psíquicos.
Cabujón y engarce de plata. Con cadena de acero